La Curia Romana está que se sale! Las mujeres, que hasta ayer domingo transitabais por los presbiterios y altares de las iglesias "sin papeles", a partir de hoy 11 de enero, ya tenéis vuestro salvoconducto.
Casi medio siglo después de que los varones laicos pudieran desempeñar oficialmente el servicio de lector o acólito, ahora ya os ha llegado también el turno a vosotras.
A partir de hoy queda modificado el canon 230 del Código de Derecho Canónico, y donde hasta ayer ponía:
"los varones laicos que tengan edad y condiciones determinadas por decreto de la Conferencia Episcopal, pueden ser llamados para el ministerio estable de lector y acólito....."
a partir de hoy podrá leerse:
"los laicos que tengan edad y condiciones determinadas por decreto de la Conferencia Episcopal, pueden ser llamados para el ministerio estable de lector y acólito.....".
Lo que más llama la atención es la argumentación:
"En efecto, una práctica consolidada en la Iglesia latina ha confirmado también que estos ministerios laicos, al estar basados en el sacramento del Bautismo, pueden ser confiados a todos los fieles idóneos, sean de sexo masculino o femenino, según lo que ya está previsto implícitamente en el canon 230 § 2."
Es decir, que hace cincuenta años implícitamente ya se decía eso, pero explícitamente no. Pues, o bien yo necesito un intérprete hoy, o quien hace cincuenta años redactara tal medida, ciertamente, a pesar de saber latín, no se explicaba bien.
Manifiesto mi perplejidad, pero, en días como hoy, no sé qué es peor, si los manifiestos errores históricos y las disonancias cognitivas de la institución eclesiástica, o su modo de enmendarlos.
De todos modos, amigas, ¡bienvenidas al "Altar"!
Nos vemos allí un día de estos.
¡Ay Dios!
© Fco. Jesús Genestal Roche.
PD.
1. Una incisiva lectora advierte que, puestos a ponerse un poco al día, hubiera sido preferible la expresión "las personas laicas", más que "los laicos".
2.Por si alguno queréis leer documento vaticano en cuestión: